Medidas a tomar previo a la movilización de un paciente

Cuando necesitamos mover un paciente se presentan algunas dificultades. Lo primordial es proteger de lesiones tanto al enfermo como al personal que ejecuta la maniobra.
Para asegurarnos un procedimiento exitoso debemos tener en cuenta los siguientes aspectos:
Conocer con claridad las restricciones de movilidad que tiene la persona.
Evaluar nuestras propias capacidades (fuerza, formación, etc.) para hacer frente al movimiento que estamos por realizar.
Cuidar sondas, goteros u otros elementos.
Utilizar medios de protección adecuados a cada caso como por ejemplo calzado antideslizante, guantes y otros.
Prestar atención a manifestaciones de dolor del paciente y respetar su umbral. Observar las reacciones que presenta ante cada movimiento.